La Última Frontera
Existen dos cosas que van a suceder. No sabemos cuándo, pero están cerca. A un par de décadas me atrevo a decir. La primera es descubrir el lenguaje cerebral. Lograr comunicación con el cerebro. De esa forma, expandir la capacidad de almacenamiento de información y disponibilidad inmediata de la misma. Obvio a estas alturas dicho dispositivo estaría conectado a la nube. Sería una especie de disco duro externo con Wi-Fi. El problema es que justo en ese momento se pierde una de las últimas barreras. Ningún humano hasta ahora puede saber exactamente que estamos pensando. Es un gran privilegio si lo piensan. Pero al poder meter información también se podrá extraer. Desgraciadamente como con todas las tecnologías hasta ahora creadas, quien no las usa está condenado al fracaso en estas sociedades artificiales hipertecnológicas poco espirituales. Por lo tanto, lo haremos voluntariamente como siempre lo hemos hecho. Un pacto más con el diablo. Uno del que no habrá vuelta atrás. Las máquinas co