México. El País de No me Acuerdo
No creo que sea un caso aislado, pero sí uno muy representativo. Desde los tiempos en que la iglesia católica tenía control absoluto sobre la educación, se ha avanzado grandemente. Pero en particular en nuestro país, sigue habiendo un grave rezago educativo y problemas socioculturales muy serios.
Si bien la educación ya es deficiente en recursos humanos y materiales. Además, los medios masivos de comunicación no proveen sino entretenimiento y no en pocas ocasiones de mala calidad, distracción, e inducen conductas consumistas y comportamientos anormales. Por no llamarlos antinaturales.
Existen experimentos del desarrolo intelectual de los niños que han demostrado que a cierta edad ya se dan cuenta cuando se pretende ocultar de ellos un objeto. Es decir, si tienen delante ellos una manzana y delante de la manzana se les pone una hoja de papel o cualquier otro objeto que impida la visión directa de la primera, un niño menor de cierta edad pensará que desapareció por completo. Y pensará: "bueno, ya no está, voy a buscar otra cosa". Con el humano llamado adulto, particularmente el mexicano, sucede algo muy parecido. Los medios masivos de comunicación ponen delante nuestro lo que ellos y sus socios, apoderados, benefactores y autoridades quieren que tengamos en la mente. Y lo que no, no lo transmiten, o lo transmiten muy poquito, para dar la sensación de variedad e imparcialidad. Eso aunado a otros distractores, toxinas y radiaciones que nos mantienen en un estado de sugestionabilidad y manipulación elevado.
Han llegado a suceder cosas muy graves como asesinatos en masa, magnicidios, robos electorales, abusos de poder, injusticia social, hambre, inequidad, secuestros, desapariciones, robos económicos escandalosos, corrupción, endeudamientos millonarios, abusos de confianza y lo que se les ocurra y lo olvidamos en cosa de días y casos no faltarán que lo hacen en minutos.
Bajo la premisa de que algo que no está en los medios no existe, nuestros gobernantes, caciques y potentados viven en la completa impunidad. Y muy probablemente sólo se trate de esbirros oportunistas ya que no creo que de ellos sea la autoría total de éste torcido complot de dominación total.
En nuestras mentes desaparece lo que no se repite. Y si no está en la mente no existe para nosotros. Es de esa forma como logran llevarnos, como verdaderos borregos, por los senderos que más convenga a sus gustos e intereses. Manteniendo nuestra mente en una sintonía con la de un niño menor de cierta edad. Y como a un niño que se le quita su caramelo, lo más que hacemos es llorar.
Comentarios
Publicar un comentario